No basta con echar un polvete en la carretera a riesgo de que aparezca un nocturno (o un diurno,dependiendo de el caso) a perturbarlos.Y luego del jolgorio sexual, tirar a la calle algo más que el siempre importante preservativo.En la gráfica,observamos la atorrancia sexual de lanzar una prenda íntima justo en el sitio donde se desarrolló la jornada fornicatoria.Debió haber sido arrojada a plena carretera por una parejita de quesudos malvivientes.Asi como también debió ser un lindo espectáculo la prenda en colocada en su sitio de rigor.
Excelente toma amigo thasher y es cierto, ya hoy en dia la atorrancia llego hasta la cama (por no decir otros lugares como las escaleras, el metro, ascensores, etc), antes se veian por las calles muy encaletados los preservativos... ahora se ven desde brassier hasta diminutos bikinis en las vias publicas...
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